El matrimonio Comendador-Leroux y ROMA.

“A S. Pietro in Montorio, sul Gianicolo, dove  c’è  il famoso tempietto del Bramante e dove amavano passeggiare Stendhal ed Ingres, vive la piu che centenaria Accademia Spagnola di Belle Arti”

G.C. Argán.   Catálogo  Exposición antológica de la Academia Española de Bellas Artes de Roma( 1873-1979).

La Academia Española  de Bellas Artes en Roma se crea en 1873.

A Iniciativa de Castelar,  fue inaugurada por Alfonso XII,  en San Pietro in Montorio (Monte de Oro)  cabe al Conde de Coello y al pintor Casado de Alisal, el emplazamiento en el Gianícolo, la octava de las colinas de la ciudad de Roma.

En el claustro del Convento de franciscanos españoles  il tempietto, levantado por Bramante entre 1502-1510  en el lugar que se creía entonces, fue crucificado San Pedro.

La internacionalidad del matrimonio de artistas queda patente en las salas del Museo Pérez Comendador-Leroux:  Florencia,  Siena, Asís,  El Cairo, Alejandría,  París, La  Bretaña, Normandia, Nimes;  Sevilla, Madrid, Extremadura,  Chile, Argentina, Paraguay, EE.UU, y muy  especialmente,  ROMA.

El matrimonio Comendador-Leroux, Enrique Pérez comendador, escultor  y Magdalena Leroux  Morel, pintora,  vivieron en Roma aproximadamente 11 años, en dos periodos bien definidos :El  pensionado de Comendador desde abril de  1934 hasta finales del año 1939  en la Academia Española en Roma; y el periodo de 1969 a 1974 en el que Comendador dirige la Española.

Pero el contacto con Italia de Comendador y Magdalena, fue anterior y por separado,  se conocieron  en 1929, pero a principios de los años 20 ambos habían viajado a Italia.

 En los actos organizados en la  Academia y en el día a día de la misma Comendador y Magdalena Leroux coincidieron  y trataron con literatos, artistas, músicos, personalidades de la vida social, cultural y política, desde su época de pensionado de 1934-39 a sus sucesivas visitas o su etapa como director de la Academia. En los años de pensionado asiste a la Bienal de Venecia de 1938, con sala propia en el Pabellón Español, compartiendo esa distinción con el pintor Ignacio Zuloaga.

En abril de 1934 llegó Comendador a Roma, dos serían sus objetivos principales, un espacio para dibujar y la reforma del reglamento con el fin de que las mujeres o maridos de los pensionados pudieran dormir en la Academia. Era director de la Española, D. Ramón María del Valle y Inclán y sin poner en duda la brillantez e indiscutible valía del literato español, Comendador mantuvo una posición, que curiosamente se pareja a la expresada por Margarita Nelken,  recogida en el Acta del Patronato del Museo Nacional de Arte Moderno celebrada el 27 de enero de 1933 , trascrita por Joaquín de la Puente, en ella propone  para la dirección al escultor Victorio Macho.

 

FOTOGRAFÍAS

Magdalena Leroux, Enrique Pérez Comendador, Antonio Navarro en los Jardines de la Academia junto a los pensionados: (Juan Müller),  Francisco Lagares y  (Pedro Cano) y Francisco Lagares en uno de los estudios de la Academia,  estudio  pintado al óleo por Magdalena Leroux,  expuesto actualmente en la Sala Estudio.

Con la arpista MARÍA ROSA CALVO – MANZANO  durante el concierto que ofreció en la Academia Española, por allí pasó también Andrés Segovia y el pensionado por Música y compañero de Comendador desde 1934 a 1939, José Muñoz Molleda.

Comendador coincidió con artistas de la promoción 31-34, pero la suya será la del 34, los acontecimientos del 36 determinan que no todos permanecieran hasta el 39. En arquitectura  Ignacio Hervada, en escultura junto a Comendador, Honorio García Condoy en grabado continúo en la Academia  Manuel Pascual y en pintura coincidió con Luis Berdejo Felipe y con Jesús Molina García de Arias (34 y 35) y de 1934 al 36 con Balbino Giner y con Arturo Souto.

 

DOCUMENTOS de su paso por la Academia, siendo directores de la misma D. María del Valle Inclán,  D. Emilio Moya  y  secretario D.  José Olarra.  Discurso pronunciado por Comendador el 11 de junio de 1969 en la toma de posesión de la dirección de la Academia Española en Roma y Boletín con el nombramiento como Director de la Academia de Bellas Artes de Roma.

                En varias ocasiones desde su toma de posesión en 1957 como Académico de San Fernando,  Comendador será miembro de la Comisión de la Academia de Roma, al igual que perteneció también a la de escultura o a la de Monumentos, con tan clara repercusión en las declaraciones de Conjuntos Históricos en Extremadura durante la década de los 60.

Abre esta  pequeña muestra un cuadro de Magdalena de la última época en Roma,  realizado con ceras, se trata de uno de los lugares emblemáticos de la ciudad, la Fuente Paola, lugar de acceso al Gianicolo y la Academia.

 

“En la Academia Española de Bellas Artes en Roma, Magdalena y yo nos hicimos mejores en el más amplio sentido del concepto. Allí aprendimos y comprendimos amando, ahondamos nuestras raíces en el pasado mientras tratábamos, tratamos, siempre mirando hacia adelante, de elevarnos. Guardamos gratitud profunda y amor inextinguible para la Academia en la que gozando y también sufriendo pasamos once años, seis pensionado, cinco director, de nuestras vidas creando".  Enrique Pérez Comendador.

César Velasco Morillo

Director

Matrimonio Comendador-Leroux y Roma