Museo
El museo está ubicado en una antigua casona de finales del XVIII y principios del XIX construida por la familia de Miguel de Arce Soto y Quiñones y Pedro Lumeras Quiñones más que posible intervención de arquitectos salmantinos que trabajan en Hervás en el último cuarto del XVIII (Nicolás Rodriguez, Juan de Sagarvinaga o Jerónimo Garcia de Quiñones). situada en el centro de la población entre las plazas de González Fiori y de “La Corredera” que perteneció a la familia Dávila, . El edificio de planta rectangular presenta fachada principal a la C/ Asensio Neila y posterior a los jardines que en un primer momento lo formaba una amplia extensión dedicada a jardín, cocheras , parrales, huerta y prados, algunos restos de lo que pudieron ser acceso a los jardines perduran en la C/ Braulio Navas.
La fachada principal es de sillería y obedece a una rigurosa simetría de gran horizontalidad debido principalmente a las líneas que marcan el zócalo en resalte, los sillares que marcan la línea de la planta principal y la cornisa de molduras sobrevoladas. Esta horizontalidad se ve atenuada por la presencia de pilastras en las esquinas y a cada lado de la entrada principal, sobre las que descansa un frontón triangular.
En la misma fachada además del escudo familiar en una de las pilastras, destacan las rejas de las ventanas del piso bajo y los barandales de los balcones. Las ménsulas o canes de estos, son el detalle decorativo más interesante y vienen a aportar movimiento a la sobriedad de la fachada principal.
Desde su construcción el edificio ha venido cumpliendo funciones diversas desde el uso residencial a Comandancia militar durante la guerra o Biblioteca durante la construcción del edificio de maestría en una de las salas de planta baja. Ha vivido varias intervenciones, la más destacada la realizada para su adecuación como espacio museístico. En 1969 había sido incluida en la Declaración del Conjunto Histórico de Hervás acompañando al Barrio Judío y a otros edificios de los S. XVI al XVIII – Iglesia de Santa María, Convento Trinitario, Enfermería Franciscana, declaración promovida por el folklorista hervasense Emilio González de Hervás, que contó con el apoyo de Enrique Pérez Comendador en calidad de miembro de San Fernando.
El edificio presenta tres plantas en la fachada del jardín producto de la adaptación a la ligera pendiente del terreno, Ha sufrido varias intervenciones, aunque en líneas generales el edificio conserva el volumen, la espacialidad y la distribución original marcada por el eje señalado por la puerta principal y las escaleras. El respeto de las intervenciones realizadas con los muros de fábrica, espacio de escalera y los artesonados de la entrada y solera de escaleras y los elementos de cantería en chimenea, hornacinas y vanos de puertas y ventanas ayudan a conservar el carácter de la edificación. En el exterior destaca un pequeño aljibe cubierto por una bóveda de cañón de sillares que sirve de apoyo a uno de las fachadas laterales del edificio.
La fachada del jardín era la más afectada por las sucesivas reformas y adaptaciones a las necesidades de los propietarios presentando una serie de construcciones añadidas que desfiguraban su traza original; por otro lado otras dependencias exentas del edificio principal cumplían las funciones de antiguas cuadras y graneros.
Junto a la obra de Comendador, la pintura de Magdalena Leroux Morel nos propone un viaje por las ciudades conocidas y sentidas por este matrimonio de artistas: París, Sevilla, El Cairo, Madrid, pueblos y ciudades de la geografía extremeña: Cáceres, Plasencia, Badajoz, Hervás, Aldeanueva del Camino… y Roma, una y otra vez en la obra de ambos, convirtiendo al Museo Pérez Comendador-Leroux- integrado en la Red de Museos de Extremadura - en parada obligada de la hoy ruta cultural de la Vía de la Plata. Su dilatada trayectoria artística se fundamenta en la búsqueda de la belleza, de las estructuras justas y el equilibrio clásicos, basadas en la figura humana en el empleo de materiales tradicionales: bronce, madera, barro , piedra… y en la realización de retratos: El pintor Javier de Winthuysen, Andrés Segovia, Vera von Richther, el escultor Enrique Monjó, desnudos: Sansón y Dalila, La Siesta, La Mujer del Cántaro, Campesina. Obras monumentales: El Guadiana, o la serie de los conquistadores: Vasco Núñez, Valdivia, Pizarro, Hernando de Soto…
Se suman a los fondos del Museo obra menor de amigos del matrimonio: Eugenio Hermoso; Alfonso Groso, Zuloaga. Fondos museísticos que se vienen abriendo a jóvenes artistas extremeños que han expuesto en la Sala de Exposiciones temporales del Museo: Pilar Molinos, Pedro Gamonal, Juan Gila o José Luis Acera entre otros. En los últimos años se expone la obra del artista extremeño Ángel Duarte Jiménez, en contraste con el clasicismo de Comendador la obra de Duarte, realizada en materiales industriales: poliester o acero inoxidable, vidrio, se enmarca dentro de la abstracción geométrica y viene a enriquecer la oferta expositiva de un museo que completa su oferta cultural con otros servicios y actividades culturales : Biblioteca Pública A. Arrojo Muñoz, Escuela Municipal de Música, talleres, cursos de verano dedicados a la plástica y a la música.